Qué hace que personas cómo Paul Wolfowitz, conocido en todo el mundo por haber sido el número dos del Pentágono en la época de la invasión a Irak y después presidente del Banco Mundial, adopte decisiones tan cuestionados como incrementar generosamente el sueldo de la novia que es funcionaria de la institución que él dirige.
Por qué tanta liberalidad digna de mejor causa.
Por qué motivos, a pesar de todas las acusaciones que se le han hecho, actúa como si la cosa no fuera con él e inclusive, con el mayor desparpajo, ha afirmado que no piensa renunciar .
Por qué el Presidente Bush le brinda su apoyo incondicional a Wolfowitz a pesar de que en todas partes las críticas a su gestión como presidente del Banco Mundial siguen creciendo en forma sostenida. Importantes medios se han pronunciado sobre el caso en todo el mundo , pero aún así Wolfowitz continúa inamovible en su puesto.
Es muy posible que existan razones desconocidas para nosotros en relación a la actitud del señor Wolfowitz y también, al sostenido e inexplicable apoyo presidencial que viene recibiendo.
Pero de lo que no cabe ninguna duda es que Wolfowitz ha procedido de manera equivocada, y aunque no quiera reconocerlo, va a tener que renunciar lo más pronto posible.
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