Paul Wolfowitz es presidente del Banco Mundial. Antes de ocupar su actual posición, fue el número dos del Pentágono y tuvo una gran participación en el diseño de la estrategia para la invasión de Irak. Es un hombre muy cercano al presidente Bush, y el mandatario le ha manifestado su absoluta confianza y total respaldo, ahora que Wolfowitz es cuestionado dentro y fuera de la institución que dirige, por haber elevado de categoría e incrementado el sueldo a una empleada del Banco, con la que mantiene una relación sentimental.
Aunque la situación resultaba insostenible, Wolfowitz ha hecho todo lo posible por quedarse en el cargo sin contemplar la posibilidad de renunciar.
Sin embargo, la BBC informa que el día de hoy, el Financial Times de Londres, ha publicado una carta suscrita por 42 ex altos funcionarios del Banco Mundial, en que abiertamente piden a Wolfowitz que renuncie a dicha institución.
Los firmantes sostienen " que ha perdido la confianza y el respeto de la gente y de los empleados del Banco en todos sus niveles".
Después de esa publicación creo que Wolfowitz, por respeto a si mismo, debería renunciar al Banco Mundial, a pesar del respaldo que le está brindando el presidente Bush.